Por Isamar Anzalotta Hernández
Debí haber puesto
la planta la plantita de poca pazyciencia
para que buscara agua en madrugada
debí haber con mis manos debí
sobre la firme esfera de cristal que duele
poner esa matita, esa plantita
desde el dolor inmenso de la voz
desde toda la pulpa que se crece
y han crecido solo sus raíces sin agua,
bebí por lómenos,
debí de ella entre tanto
anunciada la raíz sin la semilla
debí haberla por un lapso
en el juego cuando la miré
debió haber sido entre los días de puertas
fue todo en mí cada cosa
siempre se dio un prolongar gigante
debió ser ella que a mi no se parece
para estar por siempre en la mesa
siempre extrañando pensando
en lo que debí haber puesto para recordarte.